Cambia la culpa por la curiosidad
Lo peor que puedes hacer cuando no cumples una promesa (hacia ti o a los demás) es sentir culpa. Esa emoción no te aporta nada positivo. En cambio, puedes sentir mayor curiosidad, es decir, tratar de entender por qué no lo hiciste, cuáles serían las consecuencias de repetir esa conducta y cómo puedes cambiarla.