¿Crees que quejarse es una etapa necesaria para tomar conciencia, cambiar y para hacer sentir tu opinión? ¿Que no quejarse equivale a ser sumisa, a no hacer nada y a dejar que las cosas se queden así? Lee este artículo para que veas por qué puedes hacer en lugar de quejarte.
¿Qué hacer cuando no se tiene ánimo? ¿Cómo tratar esos días grises en los que el sol no sale y la motivación parece esconderse también? ¿Cómo ser productiva cuando sólo esperas quedarte acostada en la cama y lo último que quieres es ponerte a trabajar? En este artículo te doy 5 consejos para actuar en estos casos.
Aprender nuevos conocimientos, asistir a cursos y actualizar constantemente lo que ya sabes, son excelentes acciones, si sabes traducir lo aprendido en nueva información, productos o servicios que serán de utilidad para ti y otros. Es muy fácil caer en la trampa de consumir (información) sin parar. Si es tu caso, lee este artículo.
Aprender a celebrar tus pequeños éxitos, tus pequeñas victorias del día a día, es la mejor manera de generar más y más de esos éxitos. En este artículo te explico por qué y te doy varias maneras para aprender a celebrar. La mejor manera de generar éxitos es celebrándolos. Un éxito celebrado es un éxito multiplicado.
La información y los conocimientos evolucionan a una velocidad impresionante. Si no aprendes constantemente, en poco tiempo tus conocimientos quedarán obsoletos. Tu mente y tu espíritu también se verán afectados. Aprender te hace descubrir cosas nuevas, ver el mundo de manera distinta, ser mejor en lo que haces, modifica tu cerebro.
En este artículo te presento 30 habilidades que necesitas para desarrollar una gestión del tiempo eficaz y productiva para ti y que te ayudarán a lograr lo que tú quieres en la vida. Todas ellas dependen de ti, por lo que sólo tú las puedes desarrollar o dejar estancar. Todas ellas se pueden mejorar constantemente.
Si paras lo que estás haciendo, grande o pequeño, importante o no, para ayudar a quien te pida ayuda, debes leer este artículo. Si, por cualquier razón, no ayudas a esa persona y el sentimiento de culpa te invade, también debes leer este artículo. Aquí te explico por qué lo haces y cómo solucionar este problema.
¿Tienes una larga lista de cosas por hacer, o TO DOs, pero en lugar de ponerte a trabajar en ella decides comenzar otras más? ¿Estás dispuesta a trabajar en ese proyecto que dejas para después, pero en lugar de ponerte a trabajar en esa tarea, prefieres revisar tus correos electrónicos, asegurándote que retomarás eso más tarde?
El perfeccionista cree que el buscar la perfección es una característica noble que todos deberíamos perseguir y que no buscar la perfección es sinónimo de mediocridad. Pero se olvida que esa manera de ser le impide terminar lo que hace y avanzar en otras actividades, por el temor de criticarse y de ser criticado por su trabajo.
Cerrar tus “gavetas” es una analogía para todo aquello que está en tu mente, que aún no has terminado y que disminuye tu concentración para lograr tu objetivo actual. Cerrar tus gavetas antes de comenzar a trabajar significa terminar todo lo que está en curso antes de lanzarte en una nueva aventura.