Hay una pregunta que, si la sabes hacer, te abrirá las puertas de la productividad. Esta pregunta te permite ir a lo esencial, a definir tu prioridad N°1. En este artículo te explico cuál es la pregunta y te doy tips para que sepas hacerla y también para que la respondas mejor.
“¿Qué es lo que puedes hacer respecto a ese problema u objetivo que tienes, que hará que todo lo demás sea más fácil o innecesario?” Esa es la pregunta fundamental que se hacen Gary Keller y Jay Papasan en su libro Lo Único. Junto a esta pregunta, muchos otros consejos de gestión del tiempo. En este artículo, los tres consejos que más me impactaron.
¿Consideras que tu vida es mediocre, normal, buena o extraordinaria?
Si tu respuesta es una de las primeras tres opciones, ¿quieres formar parte del pequeño grupo que considera tener una vida extraordinaria? Si quieres averiguarlo, este artículo es para ti.
No importa qué tantas técnicas de gestión de tiempo, de productividad, ni de organización conoces, si no sabes manejar tu mente, ninguna técnica, sistema o método funcionará, porque todos ellos dependen del uso que hagas de los mismos. Por eso, más que aprender de gestión del tiempo, procura aprender mejor cómo funciona tu mente. En el artículo de hoy aprenderás más de esto.
¿Cuántas veces te quejas de no tener tiempo, o que el tiempo no te alcanza?
Sin embargo, cuando tu situación personal cambia dramáticamente, te das cuenta de que, de repente, eres capaz de hacer muchísimo más con el mismo tiempo. ¿Cómo es posible? ¿Y cómo podemos aprender de esas experiencias para nuestro beneficio presente?
Todos soñamos con ganar más y más tiempo. Que el día tuviese 48, 72, 100 horas y así, sí lograríamos hacer todo lo que queremos hacer, sin estrés, sin angustias, sin burn-out. Seguramente ésa sería la solución de casi todos nuestros problemas. Si quieres saber cómo hacer para ganar más tiempo, te invito a leer este artículo.
Dos personas pueden lograr lo mismo durante un día, una de ellas se siente productiva y la otra no. La productividad no depende tanto de qué hiciste, cómo lo hiciste, ni en cuánto tiempo lo hiciste, sino en tu capacidad a sentirte productiva (mucho, poco o para nada). En este artículo aprenderás más sobre el tema.