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Estrés

Planifica el peor escenario

Cuando planificamos un evento o una actividad, solemos preguntarnos qué debemos hacer y qué recursos necesitamos para lograrlo, pero pocas veces nos preguntamos qué puede impedirnos alcanzarlo, ni qué debemos hacer si la peor situación o los más difíciles obstáculos se presentan y cómo superarlos. Sin esta etapa, nuestra planificación será incompleta.

Si crees que no estás haciendo lo suficiente

Escucha bien la voz de tu conciencia. No te dejes preguntas sin responder, especialmente si son preguntas que te haces constantemente. ¿Haces lo suficiente o crees que deberías hacer mucho más? ¿Cuál es el límite? ¿Cómo sabes que estás haciendo lo suficiente o que deberías y querrías hacer mucho más de lo que haces hasta ahora?

Cuando tratas de hacerlo todo

Si tienes tendencia a querer hacerlo todo, a decirle que sí a todo y a todos, si te cuesta el No, si eso te hace sentir menos productiva, más floja, menos profesional, entonces debes leer este artículo. Espero que aquí entenderás por qué es contraproducente tratar de hacerlo todo.

La energía con la que lo haces

La energía con la que trabajas, y la energía que sientes luego de trabajar, no es algo banal, sino el fundamento que define la calidad de tu trabajo, de tu salud mental y de tu vida. Observar cómo te sientes antes, durante y después de finalizar cada una de tus actividades, definirá la calidad de tu vida.

No trates de hacerlo todo

Querer hacerlo todo, tenerlo todo, serlo todo, nos desgasta, nos estresa y nos quita el discernimiento de entender qué es realmente importante y qué no. No se trata de tragarse el sapo a primera hora de la mañana y luego tratar de hacer todo el resto. Se trata de tragarse el sapo y eliminar el resto.

Actividades que te ayudarán a desestresarte

El estrés crónico es una de las primeras causas de disminución de la productividad, porque aumenta el riesgo de enfermedades, disminuye nuestra capacidad de concentración, aniquila la creatividad, aumenta el número de errores y disminuye la capacidad de tomar decisiones. Por ello, en este artículo te presento ejercicios sencillos, rápidos, para mantener el estrés bajo control.

Retoma el control

Retoma el control de tus pensamientos, de tus creencias, de lo que crees que eres capaz de hacer, de tu propia identidad. Define en quién te quieres convertir, cómo decides usar tu tiempo, qué decides hacer y qué no. Tu vida y cómo usas tu tiempo, qué decides creer, sólo dependen de ti.

Principios para controlar el estrés

¿Qué tanto estrés hay en tu vida actualmente? Quizás estés consciente que vives mayor estrés del necesario y quieras disminuirlo. Quizás no estés tan consciente de ello, pero tu vida no es tan tranquila y serena como te gustaría. En cualquiera de los dos casos, te recomiendo que leas estos principios, de Dale Carnegie, para controlar el estrés.

El tiempo de recuperación

Cuando tengas un evento o trabajo que exijan de ti un esfuerzo, energía o concentración más allá de lo que estás acostumbrada a dar, planifica tiempo de recuperación para ti, tanto como planificaste esta actividad. Ésa será la clave de tu productividad continua. La recuperación es tan necesario para tu bienestar como la ejecución.

La sobrecarga de información

No seguir las instrucciones, hacer preguntas sobre lo que otra persona te acaba de decir, no querer hacer cosas que forman parte de tu trabajo, o hacerlas mal, pueden ser señales de sobrecarga de información. Se trata de un fenómeno muy común en la sociedad actualmente, debido a la exposición excesiva de información y contenido nuevo.