Tus problemas son tu oportunidad
Aprender a mirar cada uno de los problemas que tienes como una oportunidad para mejorar, para hacerte más resiliente, más capaz, más creativa y más fuerte, es una actitud de vida que puedes desarrollar desde ahora. Simplemente, pregúntate en qué aspecto ese problema que tanto te preocupa puede convertirse en una bendición y una oportunidad para ti.