¿Por qué haces lo que haces?
No tienes que seguir haciendo las cosas que has hecho hasta ahora, simplemente porque “siempre las has hecho” o porque “son obligaciones”. En cada momento, puedes decidir hacer o dejar de hacer lo que quieras. Eso empieza reconociendo que tienes ese poder sobre ti y en aceptar las consecuencias de lo que haces y dejas de hacer.