Skip to content

La regla de los 10 minutos

¿Te ha pasado que a veces quieres trabajar en algo, pero por alguna razón, te sientes bloqueada? No son realmente las ganas de trabajar en ese tema lo que te motiva, sino es el deseo de avanzar, o la obligación. Poco importa la razón, simplemente no logras hacerlo.

Y así pasan los días y las semanas, hasta que tu fecha límite se acerca y no te queda otra opción. O no tienes fecha límite, ni cuentas que rendirle a nadie más que a ti, y dejas ese proyecto para trabajar en otra cosa.

Si esto te suena familiar, te propongo esta técnica:

Trabaja simplemente 10 minutos en esa actividad, a penas dejes de leer este artículo.

Te vas a inventar muchas excusas para no hacerlo. Tu mente te va a proponer decenas de cosas que puedes realizar y que sólo te tomarán unos segundos. Dile que eso lo harás dentro de 10 minutos. Mientras tanto, coloca un cronómetro durante 10 minutos y ponte a trabajar en esa actividad que procrastinas. Pasado ese tiempo, si así lo deseas, te puedes dedicar a cualquier otra cosa. O, si prefieres, puedes continuar a trabajar en esa actividad que antes procrastinabas, pero ahora no.

En el primer caso, habrás trabajado 10 minutos en eso que procrastinabas y, si lo hiciste de manera concentrada, seguramente te sorprenderá lo mucho que lograste hacer en tan poco tiempo. En el segundo caso (el más probable) habrás avanzado o finalizado esa tarea que parecía tan odiosa y que ocupaba tanto espacio en tu mente.