En el área de la gestión del tiempo se habla mucho del futuro (la importancia de definir objetivos, cómo visualizarlos, la planificación ideal), mucho menos del pasado (es decir, tu evaluación de hechos que ya ocurrieron y cómo aprender de ellos) y aún menos del presente.
Sin embargo, la gestión del tiempo depende de tu capacidad de estar presente en cada cosa que hagas.
Manejar tu tiempo es manejar tu mente en cada momento, para vivir el presente de manera consciente.
Si no estás presente, es decir, si tu cuerpo está en un lugar, haciendo algo concreto, interactuando con otras personas (o no), pero si tu mente está constantemente en otro lugar, en otro momento, imaginando una escena distinta de la que tu cuerpo vive, en ese momento estarás manejando tu imaginación y tus expectativas, pero no manejas tu tiempo. En esos momentos, el tiempo pasa, pero tú no tomas el control de cómo lo utilizas.
Recuerda que la ansiedad ocurre en personas que viven en el futuro, la depresión en las personas que viven en el pasado y la vida en las personas que viven en el presente.