Esta técnica viene del libro “Imperturbable”, escrito por Nir Eyal.
En este libro, el autor nos habla de tres tipos de pactos que realizarás contigo misma o con los demás, para disminuir la impulsividad que puedas tener de distraerte y no lograr tu objetivo.
Existen tres tipos de pactos:
- Pactos de esfuerzo. Ellos consisten en aumentar anticipadamente la cantidad de esfuerzo que necesites para realizar la acción que no deseas, es decir, la distracción. Con ello previenes la distracción, haciéndola más difícil. Una manera de lograrlo es yendo a la oficina a trabajar (en lugar de hacerlo en casa, donde nadie te ve) o sentarte a trabajar al lado de tu jefe, lo que aumentará la presión social y te persuadirá de concentrarte.
- Pactos de precio. Se trata de apostar dinero con otra persona, de manera que mantendrás el dinero si no te distraes y logras el objetivo, pero lo perderás en el caso contrario. Este pacto se basa en el hecho que la gente tiene mayor aversión a perder (dinero, en este caso) que ganas de ganarlo. Sin embargo, ten en cuenta que sólo estos pactos son efectivos en tareas que requieren cortos momentos de motivación, y son malísimos en el largo plazo, porque comenzarás a asociar la tarea con algo negativo.
- Pactos de identidad. “Nuestra percepción de quiénes somos, cambia lo que hacemos”, dice Nir Eyal. La manera en la que nos vemos respecto a nuestra capacidad de distraernos o de concentrarnos, afecta esa capacidad. Por ejemplo, en lugar de decir “No puedo o no debo distraerme”, comienza a decirte “No me distraigo” o “No soy el tipo de persona que se distrae. Comienza a cambiar la manera en la que te ves a ti misma y comienza a hablar a los demás de manera distinta sobre ti misma.
Espero que comiences a utilizar a alguno de estos pactos para distraerte menos y lograr tus objetivos.