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Citas sobre los riesgos, que te harán reflexionar

Tomar riesgos forma parte de la esencia misma de la vida. Es imposible no tomar riesgos. Desde que somos concebidas, estamos expuestas a riesgos, pese a nuestra voluntad. Dependiendo del lugar donde naciste, las circunstancias que te rodean, el momento histórico en el que te toca vivir, y tu propia personalidad, el riesgo forma parte de la vida.

¿Sobrevives o te desarrollas?

El ser humano, como cualquier otra especie, ha evolucionado para sobrevivir. Sin embargo, cuando la supervivencia ya no es el mayor desafío, cuando las necesidades básicas están cubiertas y sabes que no morirás de hambre, de frío o asesinada por algún depredador, el instinto de evolución y desarrollo sale a flote.

Escoge tus problemas

¿Cuáles problemas tienes actualmente? ¿Qué piensas de ellos? ¿Te harán crecer como persona o te hacen sentir horriblemente mal? ¿Qué tal si comienzas a cambiar la manera en la que piensas de tus problemas, si comienzas a describirlos de manera distinta, para que te den fuerza y te hagan crecer como persona, en lugar de minimizarte?

Diez preguntas poderosas para mejorar la calidad de tu vida

La calidad de tu vida depende de la calidad de preguntas que te hagas, porque el cerebro siempre responderá a cada una de las preguntas que hagas. En lugar de hacerte preguntas que no te ayudan a empoderarte o que te hacen sentirte infeliz, en este artículo te propongo diez preguntas de alto valor.

¡Confía en ti!

Si quieres mejorar la gestión de tu tiempo, confía en que eres capaz de lograrlo. En lugar de concentrarte en lo que no haces bien, comienza a obsesionarte con tus buenas acciones: pregúntate cómo lograste hacerlo bien, qué pasos tomaste, en qué pensaste que te llevó a ese resultado. Cambia tu imagen de ti misma. ¡Confía en ti!

El silencio y la soledad

A muchas personas les aterroriza el silencio y la soledad. La razón de ellos es que les da miedo lo que puedan descubrir, gracias a ellos. Sin embargo, el silencio y la soledad son excelentes consejeras, si las sabes utilizas, si tienes las herramientas para sentir tus emociones, escuchar tus pensamientos y seguir tus instintos.

Deja de focalizarte en tus problemas

Si te focalizas mucho en lo negativo de tu vida, en lo que no está bien, en tus problemas y preocupaciones, deja de hacerlo por un momento y comienza a cambiar tu foco hacia los demás, hacia el por qué haces lo que haces, hacia tus metas y objetivos, de manera bonita, agradable y positiva.

El optimismo cruel

El optimismo cruel es pretender que los grandes problemas societales (la obesidad, la depresión, la disminución de la atención, el estrés, los problemas financieros) se deben a fallas individuales y que, por lo tanto, deben ser resueltos únicamente por cada individuo que los sufre. El optimismo cruel pretende que ignoremos los grandes intereses económicos detrás de estos problemas.

El confinamiento de los niños

Nuestros niños crecen pasando más y más horas en las escuelas y menos tiempo jugando libremente, entre ellos, sin la supervisión, ni las reglas de los adultos. Esto hace de ellos seres con mayores problemas de concentración y de comportamiento, ya que no pueden expresarse libremente, no desarrollan plenamente su creatividad, ni su capacidad de negociación y de liderazgo.