¿Qué problemas tienes actualmente?
Piensa en tus tres problemas principales.
Ahora responde, ¿Qué tipo de problemas te gustaría tener?
La realidad es que todos tenemos problemas, siempre hemos tenido y siempre tendremos. A veces serán grandes, otros pequeños; unos nos parecerán complicados y otros, más fáciles de resolver.
El ser humano está hecho para tener problemas. Y si no los tiene, los crea.
En lugar de dejar que un problema llegue a tu vida, ¿por qué no lo vas a buscar?
Si hay problemas que tienes y que no te gustaría tener, piensa cómo puedes transformarlo en un problema que te haga crecer, en uno que te empodere.
Por ejemplo, si tienes un problema de salud, ¿cómo puedes transformar ese problema en algo que te hará más fuerte? Por ejemplo, cambiando tus hábitos de vida.
Si tienes problemas de gestión del tiempo, ¿cómo puedes plantear esos problemas de manera distinta, para que te hagan crecer como persona y ser una experta de productividad?