¿Y si ser audaz es la respuesta para ser más productiva en el sentido amplio de la palabra, es decir, para vivir tu vida de la mejor manera que puedas vivirla?
Según la RAE, ser audaz es ser “osado, atrevido, intrépido, valeroso, arrojado, valiente, arrestado, brioso, resuelto, decidido, determinado, bizarro, denodado, temerario, arriesgado, aventado.”
Sus antónimos son ser indeciso y cobarde.
Ser audaz no es tan difícil como parece.
En este artículo te propongo varias maneras de hacerlo, y de comenzar, poco a poco, a despertar esta característica en tu vida.
¿Te atreves?
Contrata a una coach
No tengas miedo, ni dudes en buscar la ayuda de un experto, que puede ser un coach, mentor, terapeuta. Lo que quieras, lo que te llame a ti la atención, pero no hagas este camino sola, no porque no puedas, sino porque te tomará más tiempo.
Elimina de tu vida la compañía nociva
Elimina de tu entorno las amistades, los familiares, las conversaciones que no te ayudarán a alcanzar tus metas o que no representan esa persona en la que quieres convertir.
Sueña en grande
Es fácil conformarse, aunque sea doloroso.
Es fácil trazarse metas pequeñas, para que el dolor de no alcanzarlas no sea tan grande.
En lugar de eso, actúa de manera diferente: sueña en grande, sueña con lo que a ti te provoca, con lo que te haga vibrar.
Desafíate
Haz algo que siempre hayas querido hacer y que no hayas intentado por cualquier razón.
Cree que sí eres capaz de lograrlo.
Deja de dudar y de ponerte excusas, por muy justificadas o reales que sean.
Aunque no sepas cómo, ni cuándo, atrévete a creer que sí eres capaz y que sí lo lograrás.
Da el primer paso
Osa ser diferente
Anota las características o los gustos que tengas que te hacen sentir distinta a los demás, esas cosas que no osas hacer por miedo a la crítica y al juicio, real o imaginario.
Autorízate a asumir ese comportamiento, ese gusto, esa actitud… y autoriza a los demás a juzgarte y criticarte, si no tienen nada mejor que hacer con su tiempo.