¿Por qué ser líder te hará más productiva?
Porque ser líder (de tu propia vida y de la de los demás) te coloca en una posición de responsabilidad activa, donde no solo ejecutas, sino que decides, priorizas y movilizas recursos, incluído tu tiempo y tu energía.
Para ser líder no necesitas manejar oficialmente un equipo. Simplemente debes estar en contacto con otras personas. Por eso, todas tenemos la posibilidad de ser líder en nuestro hogar, con nuestros amigos, en nuestra comunidad, en nuestro trabajo y con nosotras mismas.
Y ahora, ¿cómo lo logras?
Gracias a las diez técnicas que te muestro a continuación.
1/ Visión clara
Un líder piensa en términos de visión y resultados, no solo de tareas.
Una líder no se pierde en lo urgente: filtra lo que hace porque todo está conectado con un objetivo más grande.
2/ Delegación
Una líder delega o elimina más fácilmente, porque una líder entiende que no es sano, ni productivo tratar de hacerlo todo, ni cargar a otras personas con todo.
3/ Feedback regular
El feedback regular implica evaluar constantemente tu propia actuación y la de tu entorno o equipo, analizando qué funcionó y qué no.
4/ Ser modelo de vida
Una líder predica con el ejemplo, es decir, es coherente entre lo que dice que hay que hacer, lo que le pide a los demás que hagan y lo que realmente hace, incluso cuando nadie te está viendo.
5/ Avance, sin presión
Esto significa:
- Invertir en el desarrollo personal de tu equipo y el propio.
- Mantener la calma bajo momentos de presión.
- Reconocer y celebrar tus logros y el de los demás.
6/ Límites claros
Una líder sabe lo que quiere y lo que no acepta en su vida. Por ello, sabe definir límites sobre los comportamientos que acepta y los que no, y la gente que acepta a su alrededor, y la que no. Por ello, define cuidadosamente su entorno.
7/ Comunicación clara
Saber comunicar es saber escuchar, confirmar lo comprendido y saber expresar tus ideas con claridad.
Saber escuchar empieza con la intención de interesarte honestamente en lo que el otro dice, y ser capaz de ser influenciado por sus ideas.
8/ Rendición de cuentas
Al rendir cuentas contigo misma y con los demás, aumentas la constancia y reduces la procrastinación.
9/ Toma de decisiones
La indecisión es uno de los mayores ladrones de tu tiempo, de tu paz mental y de tu productividad.
Una buena líder sabe tomar decisiones, lo que no implica que todas tus decisiones te darán los resultados esperados, sino que las tomas basadas en el método correcto, y sabes tomar la responsabilidad de los resultados.
10/ Responsabilidad
Independientemente de lo que pasa y de quién lo originó, una líder se hace responsable, lo que no significa que se haga el culpable, sino que reconoces cuál es tu parte en lo ocurrido, y actúas para corregirlo o prevenirlo.